(ANSA) Fue en enero de 1982. Sqadrabremón Salerno tomó la drástica decisión con la que buscó dar fin a tantos años de padecimientos. Con una Lineman AXZ de fibra de carbono especialmente adaptada, la emprendió contra la portuaria localidad de Berisso en una acción ininterrumpida que finalizó ayer, a las 18.15 horas. Tras 25 años de constante paleo, generó un movimiento de tierras del orden de los 32.467.937.978.938 m3. El motivo que lo llevó a tan monumental acción fue el hartazgo que le causó el idioma catalán.
-"Es un idioma falso. Parece francés, pero no lo es. Parece español, pero tampoco lo es. Cuando te hablan, en realidad es como si te estuvieran mintiendo. Una mofa permanente" - afirma Salerno.
Nuestro hombre examinó distintas posibilidades antes de optar por la que finalizó ayer mismo: sacarle el filo a la torre Eiffel, construir una palangana de bananas que hablen en belga o tramitar la incorporación del corno inglés como divisa unívoca que debe ser incorporada al acervo finimensual del sapatraje que conlleva a las ánimas y vive y pervive consolidando al tiempo que fabla en lenguas y descansa la retahúnce que doblega la estola en fistol, que casca y trina y loma a la vera de sí mismo en tibienza que rebaúnda en la despensa de limo, dándole al ácabe un manto y firmando en la aurora el deseo de queso en mancebo al olivo y verdea de pona que te tuvo ayer primero venite ponciano mañana letrado su me te remilga y Puna dora en comilla famiglia de bley.
Por lo visto, su decisión final fue la más acertada.
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